La Generación Z. Viajar para vivir y madurar.

La Generación Z. Viajar para vivir y madurar.

De repente se habla con un sentido negativo de esta generación que se va de año sabático, que se atreve a abandonar cosas, relaciones y hasta la posibilidad de prepararse para “un buen trabajo”  por irse de viaje. Actitudes altamente criticables por un núcleo de la población al considerarlas una evasión de las responsabilidades, sin embargo surge la contraparte, una generación que se cuestiona si una buena paga necesariamente debe venir de un trabajo extenuante con horarios que te atan, donde se pierde la noción de las propias metas y donde se pierde la salud por los altísimos niveles de estrés.

Me estoy refiriendo a  la generación Z, que son chicos  entre 10 y 18 años que ya viajan solos internacionalmente y que se atreven a inconformarse y a romper los esquemas para buscar el placer con actividades que les den sentido ¡ El haber nacido en una era totalmente digitalizada (entre 1995 y 2003) es la base para comprender cómo funciona su estilo de vida. La gente se sorprende de cómo se relacionan, su manera de vestir, de resolver problemas, de asumir retos y hasta su pasión por  viajar!.

Estos jóvenes están tan hiperconectados que ya  no se limitan por el tiempo ni por fronteras geográficas, su mundo es muy distinto al nuestro pues están siendo criados en un entorno totalmente cambiante e inmerso en nuevos medios de comunicación que además son ilimitados. Ellos no son inquietados por preguntas como ¿qué acaso no piensas en tu futuro? ¿Piensas dejar a tu grupo de generación para irte en busca de no sé qué? ¿No tienes miedo de no encontrar luego trabajo? Terminar la escuela, graduarse, trabajar para endeudarse,  casarse, tener hijos y trabajar hasta envejecer no está ya en sus pensamientos, no forma parte de su lógica.

Los también llamados multi-taskers han generado una gran capacidad de adaptación a los constantes desafíos, cambios  y exigencias que el mundo les plantea por lo que  el viajar se ha convertido en una de los ejercicios  más consumidos por los adolescentes pues al  vivir sin  prejuicios viajan con más amplitud de mente y son mucho más tolerantes a los contratiempos con lo cual se vuelven críticos más puntuales de los adultos.

Viajar en esta etapa de la vida no tiene  igual, pero además es una actividad que de manera privilegiada sugiero  a los papas que me consultan por problemas de actitud en sus hijos  adolescentes pues aporta  mucho a su formación como personas y a su vez resuelve muchos de los problemas conductuales  de los cuales los padres se quejan constantemente tales como la falta de autonomía, la timidez, el aislamiento, la flojera, o la falta de creatividad para la solución de algunos problemas. El tener que preparar sus alimentos, administrar sus dineros, sortear eventualidades, cuidarse a sí mismo o medir sus decisiones,  les conduce a la madurez tan anhelada por papá y mamá.

Ante esta nueva generación de chicos debemos replantearnos nuevas manera de comunicarnos con ellos. A veces esa osadía que los caracteriza y esa expandida seguridad puede llevarlos al caos, por lo cual es necesario hacerles saber que no es oro todo lo que reluce, que aprender a “maliciar” ciertas situaciones es útil. Lo que resta es proveerles de herramientas humanas para saber sortear la vida solos. Aunque parezca que ellos no escuchan las recomendaciones parentales es preciso hacer llegar la información adecuada para que sea consumida por ellos en el momento necesario.  La generación Z ya no se controla ni se educa introyectandoles miedos, así que despídete de ese estilo del siglo pasado porque ya son inmunes;  ellos buscan información: ¿qué hacer en caso de un accidente?¿cómo cuidar sus documentos personales?¿cómo administrar el dinero?¿a dónde acudir en caso necesario?¿cómo distinguir las formas de tráfico de personas para prevenirlo?

Tips psicológicos para incluir en el Kit de viaje:

1. Pídele a tu hijo que te investigue y te presente los peligros de la ciudad, aspectos culturales de vestimenta, roles de género, etc.  además de requisitos de sanidad (vacunas, enfermedades, etc,)
2. Asegúrate que tu hijo conoce su tipo de sangre y a qué es alérgico. Pídele que se reenvíe a su correo sus tarjetas de identificación y pasaporte escaneadas.
3. Déjale claro que el contacto periódico con la familia es impostergable. Definan horarios para video llamadas. Siempre es útil que lo puedas ver y no solo oír.
4. Utiliza la tecnología a tu favor y acuerden “mandar ubicación” como testigo de viaje. No cuesta más un “click” y puede significar mucho en momento dado.
5. Revisen juntos el itinerario.
6. Impúlsalo a ser positivo, flexible y de mente abierta.  Así vivirá la experiencia al máximo¡
7. Familiarizarse con la moneda del país al que viaja es oportuno. Hagan un presupuesto juntos.
8. Una tarjeta de crédito “para emergencias” siempre resulta útil y te permite “escanear” su comportamiento financiero.
9. Evitar zonas de peligro es mejor que enfrentar zonas de peligro.
10. No llevar cosas vistosas(tecnología, reloj, accesorios, mochilas grandes o muy coloridas)
11. Intentar discreción y no distinguirse mucho como turista.
12. No hablar demasiado de tu vida personal.