Astenia primaveral
Astenia primaveral
Cuando el
invierno va llegando a su fin y la primavera
está acercándose, algunas personas sensibles suelen experimentar la llamada Astenia Primaveral. Se trata de un
conjunto de síntomas que experimentan las personas cuando se produce el cambio
estacional, la temperatura altera nuestro sistema nervioso afectando el estado
de ánimo y tornándonos más irritables o más apasionados, se sabe que durante la
primavera ocurren una mayor incidencia de embarazos.
Al aumentar las horas de luz el hipotálamo (el centro nervioso responsable de controlar la sed, el hambre, el apetito sexual o el sueño) sufre cambios y altera su funcionamiento provocando en algunas personas con mayor predisposición una debilidad generalizada, sienten una disminución en su capacidad para realizar esfuerzos mentales o físicos rutinarios, se les va el apetito, sienten intensa somnolencia, disminuye o aumenta dramáticamente su deseo sexual y hasta pierden más cabello de lo normal.
Al aumentar las horas de luz el hipotálamo (el centro nervioso responsable de controlar la sed, el hambre, el apetito sexual o el sueño) sufre cambios y altera su funcionamiento provocando en algunas personas con mayor predisposición una debilidad generalizada, sienten una disminución en su capacidad para realizar esfuerzos mentales o físicos rutinarios, se les va el apetito, sienten intensa somnolencia, disminuye o aumenta dramáticamente su deseo sexual y hasta pierden más cabello de lo normal.
Aunque la astenia
es un problema pobremente definido y muchas veces solo sufrido por las personas
sin darse cuenta de lo que transitan, este conjunto de síntomas es parecido a
las alergias como la rinitis o el asma que muchas personas sufren en la
primavera al iniciar la polinización mientras que a otras les afecta más bien en
el estado de ánimo. En la actualidad un 65% de las personas dicen haber
experimentado astenia física o mental en algún momento de los últimos dos
años.
Las personas se
sienten sin vitalidad y faltos de energía, con lo cual su vida laboral, familiar y sentimental se ven
afectadas. Otros síntomas de la astenia
primaveral se manifiestan con olvidos constantes impidiendo la concentración y
generando una sensación de cansancio
mental que en ocasiones también provoca dificultades
para conciliar el sueño o mantenerlo.
Muchas personas-principalmente mujeres a partir de los 45 años- refieren
sentir un cansancio que siempre está ahí presente sin razón aparente.
Puede haber
muchas causas que originen este síndrome como por ejemplo algunos medicamentos,
infecciones, algunas enfermedades cardio
vasculares o neurológicas. Aunque también influyen otros factores como estar
transitando por una depresión sin saberlo o tener tanta sobrecarga laboral que
desencadena un agudo nivel de estrés generando esa astenia.
Sufrir este
decaimiento y malestar no debe ser visto como devastador, pues se trata de un
trastorno adaptativo que es transitorio y que dura hasta que el organismo se autorregula
y se acomoda a la nueva estación. Podemos facilitar su tránsito poniendo en
marcha hábitos de vida más saludables y equilibrados pues de esa manera
evitaremos la prescripción de tranquilizantes o somníferos que realmente actúan
como sedantes. Se recomienda ejecutar acciones gratificantes como viajar en
pequeñas vacaciones de manera frecuente, está comprobado que evitar largos
periodos de vacaciones y distribuirlos en más cortos pero más seguido puede distraernos y relajarnos mucho más, alejando
así el deterioro psicológico.
Si aprendemos a
vivir dentro de las leyes establecidas por la
naturaleza escaparemos a la enfermedad y reconoceremos a la salud como
nuestra compañera. Sigue los siguientes tips para conseguirlo.
Tips
para combatirla:
- Aprovecha la luz solar y levántate más temprano para equilibrar tu ciclo circadiano.
- Nunca te saltes el desayuno. Inicia el día con una dieta equilibrada.
- Usa complementos nutricionales como la jalea real. Te hará sentir resistente física y mentalmente.
- Cárgate de energía con luz solar entre 8 y 10 de la mañana, protegiendo tu piel.
- No te pierdas tu rutina de ejercicio por la mañana, así evitaras tener que ingerir medicina farmacológica al potenciar tus propias hormonas de la felicidad y buen ánimo.
- Hidrátate durante todo el día.
- Descansa bien, no te desveles.
- Evita contaminar tu cerebro con estimulantes como café, cigarro o alcohol.
- Mira el lado positivo de los cambios. Fluye con las estaciones, No te resistas al cambio.
- Aumenta tu actividad sexual para liberar endorfinas y potenciar tu sensación positiva.
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