¿QUÉ TIPO DE APEGO ES EL TUYO CON TU MADRE?
La relación con la madre es lo que determina la conducta futura del niño. Todos tenemos una forma de apego a nuestra mamá, hay diferentes tipos y algunos de ellos no tan gratos... ¿Conoces cual es el tipo de apego que tu tienes hacia tu madre?
1) Apego seguro: este tipo de apego se desarrolla cuando la madre atiende a la llamada del bebé, recibe el nombre de sensibilidad, y es la mejor cualidad que puede tener una madre. Si el bebé recibe una respuesta de la madre cuando llora, asocia a su madre con la protección, por lo que desarrollará la independencia que necesitará de mayor. Este tipo de madres enseñan a mostrar tanto emociones positivas como negativas, pero en menor medida las negativas, de manera que el niño sepa controlar sus emociones y verlas como algo normal. El niño siente ansiedad cuando la madre se va, pero es fácil apaciguar su llanto cuando vuelve, esta es la característica principal del apego seguro. El niño utiliza a la madre para explorar el mundo, ya que su madre es como “casa segura” a donde poder volver si pasa algo.
2) Apego Evitante: este es muy desafortunado, pues desgraciadamente, no todas las mamás son como las del primer ejemplo. Este tipo de madres son poco afectuosas con el bebé, por lo que cognitivamente el bebé intenta darse una explicación de por qué no acude a su llanto. Esto os parecerá sorprendente, pero el bebé es capaz de pensar “mi mamá no viene porque está ocupada”, esta información cognitiva es lo que permite al bebé soportar una relación carente de afecto. La caracterísca principal de este afecto es que si la madre se va, el niño no siente ansiedad, siente indiferencia por la marcha de la madre.
3) Apego resistente o ambivalente: se desarrolla este tipo de apego cuando la madre es muy cariñosa o rechazante al mismo tiempo. No hay un patrón de conducta maternal concreta, la madre alterna cariño e ignorancia hacia el bebé. Por ello, el bebé lo que busca es más cariño, se refugia en lo afectivo. La característica de este tipo de apego está en que el bebé tiene altos niveles de ansiedad cuando se va la madre y cuando vuelve, es muy difícil hacer que pare de llorar. Para entenderlo es como si el bebé estuviera pensando: “te vas, y ahora vuelves, pues voy a llorar más” (es como una venganza). Parece muy retorcido cognitivamente, pero así es el ser humano.
Nuestras madres son el pilar de nuestro primeros años de vida. Somos seres indefensos, pero somos pequeños exploradores activos, sabemos quién nos quiere, y lo sabemos desde pequeños. Este apego tan intenso llega hasta los 3 años más o menos, porque la madre empieza a enseñar al niño a ser independiente (a hacer pipí en el baño, comer solo, vestirse solo…) De esta manera, el vínculo sigue existiendo, pero focalizado de otra manera. El papel de la madre es enseñarnos para la vida, e.incluso sus omisiones pudieron ser de vitales para construir la persona que hoy somos. No olvides agradecer.... Siempre agradecer....
Cuenta conmigo en Facebook como Doctora Miroslava Ramírez en MORELIA.
Twitter: @MiroslavaPsic
e-mail: psicologa.miroslavaramirez@yahoo.com
Comentarios
Publicar un comentario